El odio que se siente por la eucaristía, me desgarra el corazón.

“Pero cuando voy a ver a Jesús en la hostia, me dice; “no aflojes, permanece en mí, confía en mí”, y cuando veo la virgen en la medalla milagrosa pisando la cabeza de la serpiente, vuelve la paz a mi corazón”.

Por José Álvaro Cardozo Salas.

Me tomo un tiempo para reflexionar lo ocurrido en Francia en la inauguración de los juegos olímpicos, que por fortuna no pude ver en vivo, y no voy a entrar en lo que se ha repetido desde muchos puntos cardinales del mundo, ver que Francia la gran Francia se desconfiguro. Ningún país del mundo ha sido tan privilegiado como ellos, cientos de miles de santos católicos, apariciones marianas, devociones tan bellas como la del sagrado corazón de Jesús en el “Paray-le-Monie”.  Algunos obispos han puesto el grito y le han reclamado al comité olímpico que respete las normas de las justas deportivas, pero se han excusado en que lo ocurrido es mas el reflejo de la inclusión de genero, de los bacanales griegos, de los dioses paganos de la cultura mediterránea, pero hacer una mofa de la mesa en la ultima cena celebrada por nuestro señor, donde instauro la sagrada eucaristía fue ir demasiado lejos.

Tambien debo decirlo: el silencio de Roma en cabeza del papa Francisco a quien tanto quiero y sigo sus enseñanzas, me desinflo, siento que debió haber sido el primero en reaccionar, pero se tardaron en manifestarse una semana, con un lánguido mensaje llamando al respeto por las cosas sagradas. Me siento algo desilusionado, pero a la ves confirmo una vez mas que es a través de la eucarística que este mundo se salva, que es la presencia real de Jesús que les incomoda en un mundo que reclama para si el desorden, el suicidio, la ideología de género, el aborto, el divorcio, el no querer tener hijos, el desprecio por la vida y las cosas de Dios.

Esta semana en Medellín una joven de 25 años tuvo un suicidio asistido, así como lo leen “asistido” es decir le autorizaron una eutanasia, la noticia salió por redes pero como ya no nos preocupa ni la muerte y menos de los jóvenes, quise ahondar un poco en la noticia y encontré que se le aplico la eutanasia autorizada por sus padres y por su puesto por un Juez de la república, el motivo; sufrir de una “Depresión profunda” no lo podía creer dejando un mensaje a sus amigos “los amo con todo mi corazón, son lo mas lindo que tengo”. ¿Que nos está pasando? Porque llegamos a este extremo de desolación, de tristeza, ¿de pérdida de valores? Creo que se la hemos puesto fácil al demonio, le hemos ayudado, le seguimos el juego sin tener en cuenta las consecuencias, a veces pienso que es demasiado tarde y que ya todo esto no tiene solución, pero cuando voy a ver a Jesús en la hostia, me dice; “no aflojes, permanece en mí, confía en mí”, y cuando veo la virgen en la medalla milagrosa pisando la cabeza de la serpiente, vuelve la paz a mi corazón.

Ocho días antes de empezar los juegos olímpicos se hacia en Illinois el congreso nacional eucarístico en los Estados Unidos unas 50.000 personas abarrotadas en el estadio de futbol de esta ciudad, en completo silencio adoraban a nuestro señor, seguí las imágenes desde la TV, intente subir el volumen varias veces pensando que no lo tenía, pero era el silencio de las almas postradas en adoración por mas de una hora y esto mis amigos no lo soporta el enemigo, tanto así que 8 días después el enemigo salía con el disparate de los juegos olímpicos.

Me preocupa saber hasta donde vamos a llegar con todo este despropósito, me preocupar ver viejos como yo, que ya empezamos a salir de este mundo y que las nuevas generaciones no están ni cinco interesados por volver los ojos a Dios y mucho menos a la eucaristía, por donde voy a predicar a Jesús eucaristía les pido que vuelvan con los niños, que les enseñemos a adorarlo en espíritu y verdad, antes que sean contaminados por esta generación perversa, que no quiere ver la belleza de la creación, se niega reconocer a Jesús como su señor y prefieren los placeres del mundo, de los viajes, los perros, el egoísmo de la autosuficiencia, la indiscriminada ola de esterilizaciones (vasectomías) de los jóvenes negándose el derecho de procrear y a muchos de mis cercanos de la “Tercera edad” de ser abuelos.

Hoy reclamo a mis amigos y conocidos que entendamos que sin Jesús no vamos a ningún parte, que lejos de su amor estamos perdidos, que entre más nos alejemos más difícil será encontrar el camino de regreso.

Los animo a no desfallecer, a encontrar el sentido de la vida frente a Jesús eucaristía por que al fin y al cabo la Adoración Salvara a la humanidad.