LA GRACIA DE DIOS EN MEDIO DEL CAOS
Centauro Televisión Gracia y paz
“El buen entendimiento da gracia, más el camino de los transgresores es duro”(Proverbios 13:15).
Edward Andrés Díaz Reina
Las personas entendidas son aquellas que guardan las reglas, y se esfuerzan por comportarse de una manera intachable. Así logran que la sociedad los respete y los mire y trate con aprecio.
De la misma manera son recompensados aquellos entendidos en el evangelio, que se esfuerzan por llevar su vida conforme a las escrituras. Esto no significa que el 100% de los hombres los mire con agrado y los trate con aprecio y respeto. Pero el Espíritu de Dios será fie y los llevará a encontrar gracia y favor delante de algunos.
La historia del profeta Daniel, ejemplifica esto. Por ser fiel a Dios, Daniel se ganó el favor del rey Darío, quien lo puso como supervisor de los gobernadores de las provincias del reino. Por su destreza y habilidad en el trabajo, dadas por Dios, el rey pensó poner a Daniel como administrador de todo. Una especie de primer ministro. Así se ganó el desprecio de los demás administradores y gobernadores del reino, quienes instaron al rey a promulgar una ley que prohibía adorar a un hombre o dios distinto al rey.
A pesar del edicto, Daniel continuó adorando a Dios. Todos los días, tres veces al día, oraba con las ventanas abiertas en dirección a Jerusalén. Al darse cuenta sus enemigos, lo acusaron con el rey, quien trató de revocar la ley que él mismo había sancionado, pero no pudo hacerlo. La ley de los medos y de los persas no permitía revocar leyes firmadas por el rey.
Daniel fue apresado y arrojado al foso de los leones. Pero Dios fue fiel, y selló la boca de los leones para que no hicieran daño a Daniel. Al día siguiente, luego de pasar toda la noche en angustia, el rey Darío corrió al foso a ver a Daniel, y se alegró al darse cuenta de que seguía con vida, y lo mandó a sacar.
Los acusadores de Daniel, junto con sus familias, fueron arrestados y lanzados al foso y devorados por los leones.
La historia completa se encuentra en el libro del profeta Daniel, capítulo 6.
Así sucede con todos los que son entendidos en el evangelio y se esfuerzan por agradar a Dios. La Gracia divina les acompaña y les lleva a hallar gracia y favor ante los ojos de los hombres. Y aunque atraviesen situaciones duras y caigan en la fosa del león, la gracia de Dios les ayudará a atravesar por ese difícil momento.
Más no será así con los transgresores, ellos están desprovistos de la gracia de Dios. Y como los acusadores del profeta, serán consumidos por la desgracia.
Edward Andrés Díaz Reina
Comunicador Social y periodista
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